Dos veces al año experintamos un
cambio en la hora y algunos estudios afirman que producen ateraciones
en nuestro estado de ánimo. La modificación de los patrones de
sueño- vigilia trastocan a algunas personas provocando desajustes en
los días sucesivos.
Los síntomas que se han detectado
son irritabilidad, nerviosismo, estado de ánimo deprimido o
dificultad para mantener la concentración o la atención. También
puede traer otras consecuencias como somnolencia, cefaleas, cansancio
o molestias digestivas.
Si detectaramos algunos de los síntomas
no nos tenemos que precupar ya que en unos días nuestro cuerpo se
adaprtará y sacaremos el lado positivo de tener una hora más de
sol.
¡QUÉ EL CAMBIO DE HORA NO TE ARRUINE EL BUEN HUMOR!
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